Anoche se presentó un nuevo homicidio en el municipio de Obando, con lo cual se acaba la racha de no muertes violentas que durante 7 meses presentó esta localidad norte vallecaucana.

El siniestro tuvo lugar hacia las 10 de la noche en la entrada del CIC, un coliseo nuevo ubicado en el colegio San Fernando; en dicho sitio fue baleado en repetidas ocasiones el cabo del cuerpo voluntarios de Bomberos de Obando, Cesar Escobar, quien además se desempeñaba como vigilante de la edificación y cubría el turno de la noche.

“Morado”, como era conocido, estaba a punto de recibir su turno de vigilancia cuando fue atacado a tiros por los antisociales.

Unos patrulleros que se encontraban cerca del lugar de los hechos, se enfrentaron con los sicarios mientras estos huían. No hubo capturas.

Con este suceso finaliza la racha de cero muertes violentas que durante 7 meses tenía el municipio; ya que no se habían presentado homicidios desde el día 26 de octubre del año 2016, cuando un reconocido comerciante identificado como José Gabriel Ríos “Pájaro” fue ultimado a bala.