La racha de incidentes que involucran los deportes aéreos registrados en el último mes en el departamento y que deja tres víctimas fatales, fueron objeto de evaluación por parte de las autoridades en cabeza de la gobernación, la Secretaría de Gestión del Riesgo, Fuerza Aérea Colombiana, Aeronáutica Civil, Secretaría de Salud Departamental, Organismos de Socorro, Policía y directores de las Oficinas y Comités Locales de Atención y Emergencias de algunos municipios.

El caso más reciente fue el de un parapentista de nacionalidad francesa Marc Jacques Marie, de 52 años quien murió al caer en un predio cercano al peaje la Uribe, entre Bugalagrande y Tuluá, en circunstancias que tratan de establecer actualmente las autoridades.

Entre enero y febrero de este año, otros dos parapentistas, un colombiano de 54 años y un belga de 53, fallecieron mientras practicaban el mismo deporte.

Según las estadísticas, otros ocho parapentistas han resultado heridos en igual número de incidentes atendidos por los organismos de socorro, por lo cual se busca articular con las demás autoridades de la región, principios y normas para regular los deportes aéreos, ya que al parecer el problema radica en que se están utilizando voladeros no oficiales y sin guardar las mínimas medidas de seguridad.

Ahora se busca que desde los diferentes voladeros se garanticen las suficientes medidas de seguridad para que los vuelos se hagan por expertos.

Con el apoyo de las diferentes entidades comprometidas en el tema, se espera que la práctica de este deporte sea más segura.