En las últimas horas fue capturado un sujeto de 51 años, el cual era requerido mediante orden judicial expedida por el Juzgado 3 Penal Municipal con Funciones de Control de Garantías de Buga, por los delitos de desaparición forzada, homicidio agravado, extorsión agravada, hurto calificado agravado, tentativa de extorsión y falsedad en documento privado agravada.
Este sujeto estaría implicado en un macabro caso de asesinato en serie de varios “Mototaxistas” en la localidad norte vallecaucana de Sevilla. De acuerdo con la investigación, el día 22 de octubre del año 2016, un comerciante de Sevilla mediante denuncia da a conocer la desaparición de su hermano; un mes después de la desaparición recibe una llamada de un sujeto el cual le hacía una exigencia económica afirmando que su familiar se encontraba muerto y que para devolverle el cuerpo debía cancelar la suma de 3 millones de pesos.
La víctima con el ánimo de obtener información acerca de su hermano realiza una entrega inicial de quinientos mil pesos; posteriormente el extorsionista le entrega las indicaciones donde estaría el cuerpo de su hermano, la víctima acude al sitio con un policía hallando el cadáver de su familiar el día 22 de noviembre del 2016, según la exhumación realizada por el Cuerpo Técnico de investigación (C.T.I) La necropsia arrojó que el cuerpo tenía una lesión causada con arma blanca tipo machete a la altura del femoral en una de las extremidades inferiores, la otra extremidad no se encontró en el lugar de los hechos.
El día 2 de diciembre del 2017, fueron capturados José de Jesús Betancourt Morales alias "Algodonero" y Luís Fernando Berrío Graciano alias "Botellazo", cuando pretendían recibir el restante de la extorsión, 2 millones 500 mil pesos. Mediante investigaciones se determinó que un tercero también al parecer era participe de estos hechos de homicidio, estos sujetos según su modus operandi se basaba en contratar un servicio de "moto taxi", luego en zona rural hurtaban la motocicleta y posteriormente le ocasionaban la muerte a su víctima, realizaban llamadas telefónicas a sus familiares y exigían una suma de dinero a cambio de revelar la ubicación del cadáver.
Según reporte estadístico, para los meses de octubre y noviembre del año 2016, se contaba con un reporte de siete personas desaparecidas, quienes al parecer se dedicaban al transporte informal denominado "moto taxistas", los familiares de las personas desaparecidas fueron en su momento contactadas y les exigieron una suma de dinero con el fin de decirles el paradero de los cuerpos de los occisos. 
Las tres personas se encuentran recluidas en centro carcelario como presuntos autores de los hechos investigados.