Estrés, angustia e incertidumbre, es lo que están viviendo los directivos, comunidad educativa, docentes y padres de familia de la I.E. María Auxiliadora debido a la reducción del espacio físico que se dio, luego de que la institución pasara al manejo del municipio.
Esta situación comenzó cuando la comunidad de las Hermanas Franciscanas que hasta el año pasado administró la institución, decidiera colocar unas divisiones para separar una zona donde continuarían habitando, lo que redujo los espacios para las más de mil estudiantes del colegio.
“Hoy nuestra mirada recorre una imagen de colegio sin una parte de esa gran belleza, donde ese oasis de espacios abiertos quedó limitado, recogido por una malla metálica, que corta cada día con su equilibrio, donde la libertad para caminar, correr y disfrutar de momentos placenteros se opacó”, dijo Judith Yolanda Bueno, Docente de la Institución.
Sara Pardo Franco, la personera estudiantil señaló al respecto que: “Soy la voz de 1.030 estudiantes, que pedimos que por un momento renuncien a ideas financieras; hoy 1.030 niñas tenemos el corazón en la mano, tenemos angustia y un poco más de sufrimiento por todo lo que estamos pasando y creemos que hay riesgo de perder nuestra segunda casa”.
Esta limitación del espacio tiene preocupada a la comunidad educativa que mira con angustia, como una de las más importantes instituciones de la ciudad se ve afectada en su calidad educativa.
“No podemos hacer adecuaciones necesarias para el bienestar de nuestros estudiantes por ser un lugar alquilado, situación que en cualquier momento, por decisiones administrativas tanto de la comunidad franciscana, como de los dirigentes de nuestro municipio puede cambiar”, agregó Judith Yolanda Bueno.
“Que podamos seguir contando con el nombre de María Auxiliadora y más aún, que se pueda llegar a la mejor negociación para que podamos seguir contando con nuestras instalaciones en las que por más de cuatro generaciones se han formado cartagüeñas que hoy ven incierto el futuro de la institución que las formó” dijo Paulo Andrés Sánchez, Presidente de la Asociación de Padres de Familia.
La situación fue expuesta en el recinto del Concejo Municipal, donde surgieron propuestas como la de Benjamín Agrado Restrepo para que esta zona donde se encuentra la institución, quede incluida en el nuevo Plan de Ordenamiento Territorial como área de uso exclusivo para el sector educativo, lo que facilitaría una negociación con las propietarias del terreno y que el municipio pueda efectuar las adecuaciones necesarias para recuperar el espacio.
“Yo vengo no solamente a pedir ayuda para un colegio, sino que vengo a pedir ayuda para una comunidad completa, es decir para una ciudadanía, quiero significar que defender al María Auxiliadora no significa defender un colegio, sino defender un patrimonio cultural y religioso”, dijo Carlos Emilio Puerta, Rector la Institución Educativa María Auxiliadora de Cartago.
