Las autoridades locales y departamentales rechazaron los hechos ocurridos en zona urbana del municipio de Tuluá, donde se presentaron actos vandálicos que afectaron la infraestructura estatal, entidades bancarias y locales comerciales, entre estos, el incendio del Palacio de Justicia, por parte de algunas personas y el saqueo a locales de motocicletas y venta de celulares.

Durante los hechos, un  joven estudiante de la Universidad Central del Valle identificado como Camilo Andrés Arango de 18 años, falleció por una herida de arma de fuego. Dos más resultaron heridas.

También fueron capturadas fueron nueve personas quienes  serán presentadas ante la Fiscalía General de la Nación para que respondan por los delitos de daño en bien ajeno, terrorismo, incendio y daño en bienes del estado.

Los desmanes se iniciaron luego de que la fuerza pública procediera a despejar una vía que permanecía bloqueada.

Los revoltosos también intentaron destruir varios CAI, pero gracias a la oportuna reacción de los Policías adscritos a esas unidades se logró evitar que se presentaran daños materiales y lesiones a los uniformados.

Ante la grave situación el alcalde decretó el toque de queda en todo el municipio desde las 10 de la noche hasta las 5 de la mañana hasta este jueves.