Un acuerdo bilateral entre Panamá y Estados Unidos, implementado desde julio, ha logrado reducir el número de migrantes irregulares que cruzan la peligrosa selva del Darién. Según un comunicado emitido por la Embajada de Estados Unidos en Panamá, el flujo migratorio de ciudadanos ecuatorianos ha disminuido en un 92%, y el de colombianos en un 65%, en comparación con el mismo periodo del año anterior.
El convenio, firmado el 1 de julio, establece la repatriación de migrantes irregulares que ingresan a Panamá a través de la frontera con Colombia. Estados Unidos financia los vuelos que permiten la deportación aérea, cumpliendo con las leyes migratorias panameñas. «Desde que comenzaron los vuelos, hemos observado una reducción significativa en el cruce de migrantes ecuatorianos y colombianos», señala la Embajada de Estados Unidos en Panamá en un comunicado.
Impacto en las cifras migratorias
El flujo migratorio irregular ha estado dominado en los últimos años por ciudadanos venezolanos, aunque el acuerdo no ha podido aplicarse a ellos debido a la suspensión de relaciones diplomáticas entre Panamá y Venezuela desde finales de julio. Hasta el 13 de octubre de 2024, las autoridades panameñas reportaron la llegada de 274,444 migrantes irregulares a través del Darién, lo que representa una disminución del 36.5% respecto al año anterior, cuando se registraron 432,211.
Hasta la fecha, se han deportado 787 migrantes en 19 vuelos financiados por Estados Unidos, con una inversión de más de 1,1 millones de dólares. Los vuelos, gestionados por Panamá, han sido fundamentales para devolver a los migrantes a sus países de origen, en particular a Colombia, Ecuador e India. También se han registrado deportaciones de migrantes a Afganistán, Pakistán, Rusia y Turquía en vuelos comerciales.
Aliado estratégico y
La embajadora de Estados Unidos en Panamá, Mari Carmen Aponte, subrayó la importancia de la cooperación entre ambos países, describiendo a Panamá como «un estrecho aliado de Estados Unidos». Además, destacó que Panamá fue el primer país en establecer este tipo de acuerdo migratorio con la nación.
El principal objetivo del acuerdo es enviar un mensaje claro: los migrantes irregulares, incluso si logran atravesar la peligrosa selva del Darién, pueden ser deportados a sus países de origen. La embajada estadounidense también remarcó que la migración irregular beneficia únicamente a las redes de crimen organizado, que se lucran a la costa del sufrimiento de los migrantes, sin importarles las vidas humanas.
El Departamento de Estado de Estados Unidos ha destinado 6 millones de dólares al Departamento de Seguridad Nacional para continuar financiando este programa, que busca mitigar la crisis migratoria en la región del Darién.