Esta semana fui a visitar a mi amigo, el cual hace casi un año no veía, por motivos que adelante entenderán, después de los saludos hablamos del tema más actual: la próxima navidad.
Recordamos como en Colombia los aguinaldos son unos juegos tradicionales en los que se apuesta algún regalo durante la época decembrina, que han acompañado a los colombianos durante muchísimos años. Son apuestas entre dos personas, quien gane recibe del perdedor objetos, dulces, galletas, vinos, cosas personales, o se deja al gusto de cada uno de los apostadores.
Mi experiencia con los mismos, empecé yo, no fue grata las veces que me aventuré en ellos y relaté:
Alguna vez en mi oficina de abogados intentamos participar de esta actividad y fue así como por parejas osamos vivir esta experiencia.
Con mi primera pareja juagamos “TRES PIES” que consiste en poner un pie en medio de los dos del oponente cuando este se encuentre distraído. Por supuesto intente ganar, haciendo lo correspondiente de acuerdo al juego a mi compañera, de inmediato al reclamarle mi premio, ella se negó a pagarme lo convenido alegando que si insistía se vería obligada a denunciarme por restricción a la movilidad, en desarrollo de lo dispuesto por el artículo 24 de la Constitución Política colombiana , que reza : todo colombiano tiene derecho a circular libremente por el territorio nacional, so pena, según el Código Penal Artículo 353ª de entre 24 a 48 meses de prisión y suspensión de las funciones públicas ¡DEJEMOS MEJOR ASI, TERMINE YO LA DISCUSION!
Con la segunda jugadora propusimos el “HABLAR Y NO CONTESTAR” donde hay que eludir cualquier pregunta con el fin de no responder, el que conteste, pierde. Era mi secretaria, quien hábilmente lo primero que me pregunto fue si podía abandonar la oficina después de almuerzo todo el día, por supuesto no conteste ¡ESTA SI NO ME GANA, PENSE YO!
Pues bien, no regresó en toda la tarde y cuando le recriminé al respecto me contestó: según la ley 1437 de 2011del Código de Procedimiento Administrativo y de lo Contencioso Administrativo arts. 84 y 85, al no obtener respuesta de una petición debidamente presentada, aplica el silencio administrativo positivo, por tanto, yo había concedido el permiso solicitado, esto no puede estar pasando, me dije, ¡PERO ACEPTE LA NUEVA DERROTA!
Con mi tercera contendora creí que me iría mejor y esta vez escogimos “EL SÍ Y EL NO” donde cada persona elige una de las dos opciones para responder de esa manera a cualquier pregunta, el objetivo es que la otra persona se equivoque de respuesta, entonces pierde. Cuando la relatada contraparte trato de exponerme realizando una pregunta que requería resolverse con una respuesta positiva o negativa , de inmediato evadí utilizar cualquiera de los vocablos prohibidos e inmediatamente me increpó : El artículo 208 del Código de Procedimiento Civil, modificado por el artículo 21 de la Ley 794 de 2003, en su inciso 7º, determina que si el interrogado se negare a contestar o diere respuestas evasivas o inconducentes, el juez lo amonestará para que responda o para que lo haga explícitamente, la norma que lo que prevé es que el interrogado responda de manera clara y directa ¡POR SUPUESTO RESPONDI CON UN SI, Y VOLVI A PERDER!
Sin embargo, no estaba dispuesto a darme por vencido y con la cuarta intente “PAJITA EN BOCA” estaba convencido que en este no corría ningún riesgo pues este juego es uno de los más populares y se trata de tener algo en la boca, puede ser un dulce o un pedazo de papel, y cuando alguno de los participantes diga ¡Pajita en boca! las personas deben abrir sus bocas y mostrar el dulce o papel ¡HECHO, CERO RIESGOS!
¡PUES NO! Cuando ella me grito la frase de guerra y le saque la lengua para mostrar lo que allí llevaba, ahí fue troya, me refirió acerca del exhibicionismo que es un delito tipificado en el artículo 185 del Código Penal que sanciona a quien ejecuta actos de exhibición obscena o de naturaleza sexual al mostrar órganos genitales, le conteste que yo solo le había mostrado la lengua y me contesto ¡por eso, piense…piense! ¡HABÍA VUELTO A PERDER IRREMEDIABLEMENTE!
Terminé el relato diciendo a mi amigo, al que visitaba, por eso he decidido nunca volver a jugar esos tales aguinaldos navideños ¡HOY EN DIA NO HAY FORMA DE GANAR!
Imagínate yo, me respondió él afligido, a mí se me ocurrió jugar con una amiga al “BESO ROBADO” que consiste en que cuando la otra persona esté completamente descuidada, se aprovecha para darle un beso en la mejilla o la frente. Por eso estoy aquí en la cárcel pagando un año de condena pues la muy ladina me demando por acoso sexual según el artículo 184 del Código Penal. Termino la condena el 15 de diciembre, preciso cuando tradicionalmente empiezan esas apuestas navideñas ¡AL QUE ME PROPONGA ALGUNA LO MATO!
Nos abrazamos en la puerta del penal, para despedirnos, con los ojos inundados de lágrimas, al fondo se escuchaba pletórica la voz de GABRIEL ROMERO interpretando su mítico coro ¡Maldita Navidad/ con tus luces y colores/maldita Navidad/sólo dejas sinsabores!
KIKE NARANJO