
María Cristina Lesmes, secretaria de Salud del Valle del Cauca, se refirió este fin de Semana al cierre de la Clínica Farallones y al futuro de las clínicas privadas ante la falta de recursos.
En su intervención, Lesmes expresó preocupación por el cierre de las áreas de obstetricia y neonatología de la Clínica Farallones de Cali, lo que impactará directamente en la atención a madres, recién nacidos y personal médico. Según la funcionaria, esta situación agravará la congestión en otras clínicas en un contexto de crisis financiera que afecta a todo el sector salud.
Ante este panorama, se prevé un nuevo desembolso de recursos el 8 de febrero, mientras se estudian propuestas para aliviar los problemas financieros de la red pública de salud. No obstante, Lesmes enfatizó que la desfinanciación del sistema es un problema estructural a nivel nacional.
Desfinanciación y cierre de servicios
La secretaria explicó que el retraso en los pagos de las EPS a los prestadores, especialmente a los privados, ha generado una crisis en el departamento. «El pago a los hospitales públicos no supera el 60% del gasto mensual, lo que obliga a los prestadores a cerrar servicios altamente costosos como salas de maternidad, pediatría y urgencias», afirmó Lesmes.
Estos servicios, según la funcionaria, son particularmente costosos debido a su operación 24/7 y a la necesidad de contar con un recurso humano especializado que garantice la calidad en la atención.
El cierre de la Clínica Farallones es el más reciente de una serie de clausuras progresivas en el sistema de salud del Valle. «No se pueden seguir financiando servicios que no son reconocidos oportunamente ni en su totalidad», señaló.
Crisis de las EPS y su impacto en los prestadores
Lesmes reveló que, en el Valle del Cauca, ocho de las diez EPS están intervenidas, lo que afecta al 90% de la población afiliada. «Estas EPS fueron intervenidas por problemas financieros. Aunque se les asignaron nuevos gerentes interventores, no cuentan con recursos adicionales», explicó.
Ante la escasez de fondos, las EPS han optado por priorizar los pagos a las instituciones públicas, cubriendo apenas el 60% de los costos, mientras que los prestadores privados reciben pagos fragmentados y limitados. «En el Valle del Cauca, el 85% de los prestadores son privados, lo que hace que la situación sea insostenible», advirtió.
Red integrada de servicios: una solución en marcha
En respuesta al llamado de la gobernadora Dilian Francisca Toro sobre la urgencia de consolidar una red integrada de servicios, Lesmes afirmó que ya se han iniciado acercamientos con las EPS y se han pactado reuniones para analizar su implementación.
«La red integrada permitiría un tránsito más ágil de los pacientes entre los diferentes niveles de atención sin necesidad de autorizaciones. Para ello, es fundamental una contratación razonable que garantice el pago oportuno de los servicios y una atención integral sin barreras para los usuarios», concluyó.