El Papa Francisco ha llamado a la iglesia a evitar «todo fanatismo» u «obsesiones de otros tiempos» en una nueva encíclica presentada este jueves, en la que también aboga por «reconocer la dignidad de cada ser humano».
En su llamado a la reflexión, el Papa Francisco instó a la Iglesia Católica a distanciarse de «fanatismos» y «obsesiones de otro tiempo», durante la presentación de su nueva encíclica titulada Dislexita nos.
La Iglesia no necesita «reemplazar el amor de Cristo con estructuras caducas, obsesiones de otros tiempos, adoración de la propia mentalidad, fanatismos de todo tipo que terminan ocupando el lugar de ese amor gratuito de Dios que libera, vivifica, alegra el corazón y alimenta las comunidades», apunta el pontífice en este documento solemne.
La nueva encíclica de Francisco se titula ‘Dilexit nos’ y aborda «el amor humano y divino del Corazón de Jesucristo» con una serie de reflexiones sobre textos magistrales para un mundo que «parece haber perdido el corazón», según explicó él mismo al anunciarla en junio pasado.
Por último, el Papa lamenta la presencia en la Iglesia de «pastores concentrados solo en actividades externas, reformas estructurales carentes de Evangelio, organizaciones obsesivas, proyectos mundanos y reflexiones secularizadas».
Advertencia
Una de sus advertencias para la iglesia romana es el «resurgir» en su seno del «jansenismo», una doctrina herética surgida en el siglo XVII que consideraba a los hombres y mujeres corrompidos desde el nacimiento y atribuía la salvación solo a algunos.
«Debo advertir que dentro de la misma Iglesia renació con nuevos rostros el dañino dualismo jansenista» en las últimas décadas, avisa en el texto, afirmando que esta visión intransigente ve las expresiones de la fe popular «peligrosas».
Otra preocupación de Francisco plasmada en su encíclica es «la multiplicación» en las sociedades de «diversas formas de religiosidad» que no hacen referencia a «un Dios del amor» y que considera como «manifestaciones de una espiritualidad sin carne».
Pero también alerta de «una fuerte avanzada de la secularización que aspira a un mundo libre de Dios», en medio de una sociedad «obsesionada con el tiempo libre, el consumo, la diversión, los teléfonos y las redes sociales».
Lazos fraternos
Francisco advirtió que la Iglesia no debe caer en la tentación de «reemplazar el amor de Cristo con estructuras caducas, fanatismos de cualquier tipo o adoración de la propia mentalidad», los cuales, según el pontífice, terminarán ocupando el lugar del amor libre y vivificante. de Dios. «Ese amor que alegra el corazón y alimenta a las comunidades», señaló en el documento solemne
Alerta ante el resurgimiento del jansenismo
El Papa también lanzó una advertencia sobre el resurgimiento de tendencias intransigentes dentro de la propia Iglesia, señalando el retorno del «jansenismo», una doctrina herética del siglo XVII que enseñaba que los humanos nacían corrompidos y solo algunos podrían alcanzar la salvación. «Debo anunciar que dentro de la misma Iglesia ha renacido, con nuevos rostros, el dañino dualismo jansenista», expresó el Papa, lamentando que esta visión percibía las expresiones de la fe popular como «peligros».