El Papa Francisco conmemoró este domingo el 79° aniversario de los bombardeos atómicos en Hiroshima y Nagasaki, haciendo un ferviente llamado a la oración por la paz en medio de los conflictos globales.
Durante su alocución en la Plaza de San Pedro tras el rezo del Ángelus, el Sumo Pontífice recordó los trágicos eventos que devastaron las ciudades japonesas y pidió a los fieles encomendarlos, junto con las víctimas de todas las guerras, a la misericordia de Dios.
«Renovamos nuestra intensa oración por la paz, especialmente por la martirizada Ucrania, Medio Oriente, Palestina, Israel, Sudán, Myanmar», manifestó Francisco, destacando la urgencia de rezar por las naciones afectadas por la violencia.
Además, el Papa extendió su súplica a las víctimas del reciente accidente aéreo en Brasil, que cobró la vida de 62 personas esta semana.
Llamado a la fe verdadera
En otro momento, Francisco recordó la celebración de Santa Clara de Asís, cuya festividad se conmemora cada 11 de agosto, y expresó su afecto hacia todas las Clarisas.
«La verdadera fe y oración abren la mente y el corazón, no los cierran», afirmó el Papa, advirtiendo sobre aquellos que practican la religión no para escuchar a Dios, sino para confirmar sus propias ideas.